martes, 3 de abril de 2007

Un gran descubrimiento

Puerta de la Cadena.Toledo

Hace unos meses visité una ciudad increíble, donde se palpa la historia mientras se camina por sus calles. Y a pesar de que son infinidad las subidas y bajadas que uno tiene que hacer mientras visita su casco histórico, eso es lo que hay que estar dispuesto a pagar por viajar a la Edad Media.


Llegas en coche y unas enormes puertas te dan la bienvenida, ese es el preludio de un fin de semana inolvidable.

Aunque visites el hospital, la sinagoga o una mezquita, lo que de verdad no te puedes perder es la Catedral (donde pagas una entrada que bien merece la pena). Dentro de la catedral se encuentra un objeto sin igual ejemplo de la más brillante platería de España, la custodia que Enrique Arfe realizó por orden de Isabel La Católica con el primer oro que Cristobal Colón le envió de América.


Desde aquí quiero reconocer el trabajo de una azafata que explica la obra de arte con pasión al público que a su alrededor se congrega. La gente se arremolina porque ver algo bello es reconfortante , pero verlo y comprenderlo mucho más.
Hace un grandioso trabajo, envidiable sin duda, he visitado las catedrales más importante de nuestro país y en ninguna hay un servicio tan cuidado, en muchas ni siquiera hay guías y en otras debes pagar una cantidad adicional a la entrada (cosa que me parece excesiva).


Oye si tienes tiempo escapate, un par de días es suficiente, ahora en Semana Santa mejor que mejor. ¡Ah! aún no te he dicho donde: Toledo ¿Dónde sino?

3 comentarios:

Unknown dijo...

Primaaaaaaa!!!!! que no sabía que tenías este blog.

De lo que se entera uno dando vueltas por internet.

Oye, a tí que te gusta el arte ¿te vienes a Madrid a ver una exposición de Roy Lichtenstein?

Alfredo dijo...

Hola. La casualidad me ha traído hasta tu blog. Yo también soy licenciado en historia del arte y estoy trabajando en algo que no tiene nada que ver con ello, así que yo también me desahogo un poco en miblog donde voy poniendo cosas de arte, cine, literatura y lo que se me ocurre. Y tengo un comentariosobre Lichtenstein.

La primera y única ciudad a la que fui a opositar para dar clases en Secundaria fue Toledo. Allí me tiré 3 ó 4 días conociéndola.

Disculpa la intromisión pero no he podido resistir la tentación. Seguro que volveré por aquí.

Jessi dijo...

Hola Alfredo, eres bienvenido a mi blog siempre que quieras, de hecho tu visita me ha animado a continuar adelante con esta idea que nacio por casualidad.
Gracias, y ánimo, somos muchos los que no trabajamos en eso para lo que nos hemos preparado pero nunca debemos perder la esperanza.